Discurso en la Fiesta de Cumpleaños de la Reina en Guatemala
Discurso de Su Excelencia, la Embajadora Carolyn Davidson, para celebrar el día nacional del Reino Unido y el centésimo aniversario del voto de la mujer.
(Revisar contra entrega)
Bienvenidos y muchas gracias por acompañarnos hoy en nuestra muy especial fiesta. Esta es la tercera vez que he tenido el honor de ser anfitriona del Cumpleaños de Su Majestad la Reina aquí en Guatemala – ¡pero la primera vez que he tenido que dar el discurso! Para aquellos que no saben – o no leyeron la invitación detenidamente – y se preguntan por qué Tom está inusualmente callado, Tom y yo cambiamos de roles en noviembre del año pasado cuando fui nombrada Embajadora para Guatemala y él para Honduras. Es un gran privilegio para mí ser la Embajadora Británica en un país que ya tenía la oportunidad de conocer y amar durante nuestros dos primeros años aquí. Me siento muy honrada.
Aparte del nombre y género de la Embajadora Británica, nada ha cambiado. Mis objetivos, valores y ambiciones para las relaciones entre Guatemala y el Reino Unido son exactamente las mismas que Tom y reflejan muy claramente las políticas del gobierno británico.
Tenemos todavía la bandera de la Unión Europea aquí en la tarima porque somos todavía miembros activos y comprometidos con la Unión Europea. Y quisiera agradecerles a nuestros socios y aliados de Europa y de otros países por su fuerte apoyo esta semana después del ataque en Salibury.
Este año nuestra fiesta del Cumpleaños de Su Majestad la Reina cae en el medio de nuestros 15 días de Gran Bretaña, un festival de actividades británicas que abarca muchas áreas, demostrando muy claramente el amplio ámbito de compromiso Británico-Guatemalteco: el lunes el Buque británico Mounts Bay visitó Puerto Barrios y compartió su experiencia con sus contrapartes guatemaltecas sobre el rol que efectúan brindando asistencia humanitaria en el Caribe, especialmente después de la devastadora destrucción de los huracanes del año pasado; a inicios de esta semana tuvimos varios talleres con dos expertos del Ministerio del Tesoro Británico que compartieron su experiencia y conocimiento en el desarrollo de la infraestructura y alianzas público privadas; la próxima semana tres jueces del Reino Unido estarán aquí para discutir sobre la importancia de la independencia judicial y proveer entrenamiento a jueces sobre cómo manejar casos complejos. Como parte de un proyecto que tenemos con el Museo Británico y Google Arts and Culture, que conecta ruinas Mayas descubiertas en el Siglo 19 con la última tecnología, tenemos un kit especial en Guatemala para demostrar virtualmente estas maravillas y los invito a verlos en nuestro stand. El sábado vamos a marcar formalmente el final de un proyecto que hemos apoyado durante los últimos dos años trabajando con grupos de niñas en Mixco y la Ciudad de Guatemala para motivarlas a educarse y a ser ambiciosas por ellas mismas y por su futuro.
Educación para las niñas – y la necesidad de cada niña, así como de cada niño, de tener por lo menos 12 años de educación de calidad – es una prioridad primordial para el Gobierno Británico. Reconocemos que si cambiamos las vidas de las niñas, podemos transformar sociedades. Una ONG británica trabajando aquí apoyando la educación, Phoenix Projects, ha visto como más niñas se están quedando en la educación secundaria y después consiguiendo trabajo, destruyendo el círculo vicioso de los embarazos juveniles. Educación para las niñas y más participación política son imperativos no sólo para el desarrollo, sino también para la paz y seguridad.
Sobre participación política, pueden haber notado que algunas mujeres aquí están vestidas como si fueran a un evento de hace 100 años, y hay una muy buena razón para eso. Este año el Reino Unido está celebrando los cien años desde que (algunas) mujeres obtuvieron el derecho a votar, y reconociendo el importante rol que jugaron las promotoras sufragistas en cambiar la ley. Tengo que admitir que poseo una afinidad particular con las sufragistas; ellas fueron lideradas por una formidable dama de Manchester, Emmeline Pankhurst, y sus hijas fueron a la misma escuela que yo asistí (aunque a pesar de lo que piensen mis hijos, ¡no al mismo tiempo!). Las Pankhursts fueron unas grandes creyentes en el poder de la educación.
Algunas de las declaraciones realizadas contra ellas en ese tiempo de su campaña parecen para nosotros hoy algo absurdas, por ejemplo: Si las mujeres se involucran en política, se van a dejar de casar, dejar de tener hijos y la humanidad se acabará. Como la Embajadora de un país con una mujer como Jefe de Estado y una mujer como Primer Ministra, tengo el gusto que esos puntos de vista ya no tienen validez, que los tiempos han cambiado.
Muchas veces las personas hablan sobre la importancia de los valores tradicionales, sin tener muy claro lo que significan. Algunos valores tradicionales – el lugar de una mujer es su casa – no son los que mi país o yo defendemos. Así que seamos claros acerca de los valores que si defendemos: la dignidad y la diversidad humana, respeto a los derechos humanos, buen gobierno, igualdad de género, libertad de expresión y el Estado de Derecho. Y estamos orgullosos de estar trabajando con Guatemala en estas áreas.
También estamos orgullosos de estar trabajando con Guatemala en su lucha contra la corrupción, una lucha que ha asegurado a Guatemala una reputación mundial por mejor gobierno y combate de problemas que arruinan muchos países. Nuestro apoyo al Ministerio Público y a la CICIG está asegurado y estamos confiados que la elección del próximo Fiscal General, así como otras posiciones importantes como el Superintendente de la SAT y el Contralor General de Cuentas permitirán a Guatemala continuar en el mismo camino de pelear y prevenir la corrupción. La corrupción y un débil Estado de Derecho atemorizan a los inversionistas y los ahuyentan, yo como Embajadora quiero atraer más inversión británica a Guatemala. Es por esto que estoy muy complacida que nuestra Cámara Británica Guatemalteca ya está registrada y entrará en funcionamiento en dos meses y que será un vehículo para promover que más empresas se interesen en invertir en Guatemala.
Ya tenemos muchas empresas y marcas británicas aquí en Guatemala y quiero agradecer a algunas de ellas y a otras empresas amigas por su generoso patrocinio en nuestro evento hoy, especialmente Jaguar Energy, Transequipos, Cementos Progreso, Grupo CSC, Yantarni, Cervecería Centroamericana y Twinings. Y también quisiera agradecer particularmente al equipo de la Embajada Británica que trabajó con empeño para que este evento sea exitoso.
Además tengo el gusto de ver a muchos miembros de nuestra Asociación de Becados Chevening aquí hoy – guatemaltecos que han recibido becas completas de parte del Gobierno Británico para estudiar sus maestrías en algunas de las mejores universidades del mundo. Gran Bretaña ha trabajado duro para adquirir su reputación de excelencia académica e investigación, pero también ha tenido la suerte de tener muchos distinguidos científicos británicos. Ayer nos despedimos de uno de los más grandes científicos modernos, Sir Stephen Hawking, un físico que no estuvo confinado a su condición física, quien miró hacia las estrellas y nos inspiró a todos a hacer lo mismo. Si alguna vez existió un hombre que nos enseñara de lo que es capaz el ser humano, fue Stephen Hawking. Se le va a extrañar muchísimo.
Bueno, he hablado ya bastante sobre el sufragio femenino, pero estamos aquí hoy para marcar el cumpleaños de la única mujer en el Reino Unido que no puede votar – Su Majestad la Reina Elizabeth. Este año La Reina está cumpliendo 92 años y el mes pasado marcó el 66 aniversario desde que subió al trono. A pesar de ya tener una edad avanzada, ella será la anfitriona el próximo mes en Londres de la Cumbre de 52 Jefes de Gobierno miembros de la Mancomunidad Británica de Naciones (Commonwealth), la mayor Cumbre de líderes mundiales en la historia del Reino Unido. Ella permanece muy activa y muy admirada alrededor del mundo. Su cumpleaños es definitivamente una causa de celebración, y quisiera invitarles a todos a un brindis en honor de Su Majestad la Reina Elizabeth Segunda.